Ante cualquier intervención de la Alcaldía que atente contra los árboles de los parques Lincoln y Fidel Anze, al norte de la ciudad, los vecinos salen de sus casas alarmados y convocando a proteger estos espacios. Dicen que aún mantienen viva la “ciudad jardín”.
Desde 2018, los vecinos del parque Fidel Anze luchan por mantener el área como un bosque urbano que oxigena y recrea Queru Queru.
En este tiempo, son al menos tres los proyectos a los que los vecinos se resistieron para proteger el arbolado, pese a que la Alcaldía intentó ejecutarlos sin previa socialización.
Se trata de la construcción de un módulo con juegos infantiles y suelo engomado, la edificación de un área de actividades cívicas y una cancha de césped sintético.
La Ordenanza Municipal 3810/2008, ratificada el año pasado por el Concejo Municipal, reconoce al parque como “bosque urbano” y no como un campo deportivo.
A la fecha no existe otra disposición, por tanto, está vigente y la cancha de fútbol —que es parte del parque— se mantiene como bosque sin cambio de uso de suelo. Agencia