La selección se trae de Barinas una dolorosa goleada ante Venezuela por 4-1, un resultado que muestra lo frágil que fue ante el dueño de casa, que capitalizó todos los errores de la zaga nacional. Salomón Rondón marcó tres de las cuatro conquistas venezolanas (24’, 34’ y 66’). Darwin Machís aportó con una. Descontó para la Verde, Bruno Miranda (37’).
Bolivia fue a buscar al menos un punto ante el colero para seguir en carrera hacia el Mundial de Catar. No lo consiguió, pero pese a este traspié, y a tres fechas de la culminación de esta etapa de clasificación, mantiene algunas posibilidades de clasificar.
Venezuela dominó el juego en la primera parte a partir de la dinámica que impusieron Soteldo, Machis, Otero y Rondón. Bolivia venía mostrando orden en la marca y buen control de la pelota cuando apareció el atacante del Everton de Inglaterra en el primer palo para abrir el marcador a los 24′, de cabeza, tras un pase de Óscar González.
La conquista llanera descontroló a Bolivia que en los primeros minutos había generado dos situaciones de peligro sobre el arco de Wilker Fariñez. Cedió terreno y flexibilizó la marca especialmente sobre Rondón que a los 34 minutos recibió solo al borde del área grande y con un remate rasante sorprendió a Carlos Lampe para el 2-0.
Dura bofetada para el cuadro nacional, que tres minutos más tarde consiguió descontar mediante Bruno Miranda, el mejor hombre de ataque, que aprovechó un centro desde la derecha de Diego Bejarano para definir con un certero cabezazo. Venezuela aceleró en el segundo tiempo y fue un vendaval. Lo única llegada con peligro que generó Bolivia en la segunda mitad fue el tiro libre de Marcelo Martins a los 53 minutos. Pudo ser el gol del empate y cambiar la historia del encuentro.
La debacle empezó a los 55’, cuando Quinteros, en su intento de salir jugando desde la defensa, tocó la pelota a Bejarano y éste devuelve mal a Lampe, quien se deja anticipar por Machis que aprovechó el regalo para marcar el tercero de Venezuela.
Para el colmo de males, la selección quedó con un hombre menos desde el minuto 59 por la expulsión de Leonel Justiniano, que cometió una dura falta a Rómulo Otero. Si con once jugadores estaba complicado, con diez fue peor para Bolivia, que a los 66’ volvió a padecer ante la eficacia de Rondón, que tras un preciso pase de Otero, marcó el cuarto.
El tramo final fue un monólogo. Venezuela jugó a placer ante una Bolivia desencajada, que el martes en La Paz, ante Chile, necesita mostrar otra cara si quiere reverdecer sus ilusiones.