Mario Campos Cordero, de 38 años, quien ya fue condenado en una primera instancia por abuso sexual contra su hijo, se dio a la fuga después de que un tribunal le concedió la detención domiciliaria. El caso se registró en ciudad de La Paz.
“Esto es inaudito, porque la jueza lo benefició con la detención domiciliaria y ahora él escapó. Ya se emitió un mandamiento de aprehensión en su contra porque cuando fuimos a verificar su domicilio no había nada allí”, informó ayer la abogada de la parte denunciante, Paola Barriga.
La agresión sexual ocurrió en 2015, cuando el pequeño tenía 10 años. Pero no fue sino hasta el 2018 que se logró una sentencia condenatoria contra Campos Cordero. Aunque la denuncia señala que hubo violación, la condena sólo fue por abuso sexual: 15 años de prisión.
Esta sentencia fue ratificada en una segunda instancia y se encuentra actualmente en Sucre por un recurso de casación.
Extrañamente, en medio de la cuarentena, el sentenciado, que estaba en la cárcel de San Pedro, pidió la detención domiciliaria. La presidenta del Tribunal Primero de Sentencia de la Ciudad de El Alto, Sandra Rojas, le concedió la solicitud y pidió a Régimen Penitenciario que lo dejaran ir.
Se hizo la verificación del domicilio en la Urbanización Complemento Yunguyo, en El Alto, del cual el agresor no debía salir.
Ayer se tenía prevista una audiencia para revocarle la detención domiciliaria, pero Campos no se presentó. Cuando se lo fue a buscar a su domicilio, se constató que allí no vive nadie.
Inmediatamente la jueza Rojas emitió el mandamiento de aprehensión; sin embargo, Barriga cuestionó la decisión anterior que permitió al sindicado darse a la fuga con total comodidad. Se desconoce su paradero. Agencia