Vuelven las clases, con barbijo obligatorio y control de vacunas

El retorno a clases está confirmado para el 28 de julio de forma impostergable, y vendrá con nuevas medidas sanitarias. La Dirección Departamental de Educación anunció que se exigirá el uso de barbijo y la vacunación contra el sarampión a estudiantes, como parte de las acciones preventivas ante el incremento de casos en el país.

El Servicio Departamental de Salud (Sedes) encendió las alarmas de cara al reinicio de clases tras el descanso pedagógico. Ante la amenaza del sarampión y otras enfermedades respiratorias, recomendarán a las autoridades educativas el uso obligatorio del barbijo en todas las unidades educativas del departamento.

“Es una medida preventiva que ya está decidida como propuesta, por la dinámica poblacional y el riesgo de transmisión de enfermedades. Al volver a clases, la concentración de estudiantes puede favorecer la propagación, por eso el uso del barbijo será esencial”, advirtió el jefe de Epidemiología del Sedes, Rubén Castillo.

Además del barbijo, el foco está en el control estricto de la vacunación contra el sarampión, enfermedad que ha provocado una alerta sanitaria nacional. Castillo enfatizó que el descanso pedagógico tenía un propósito claro: que los padres aprovecharan este tiempo para llevar a vacunar a sus hijos.

 “Vamos a pedir apoyo al COEM y a las juntas de padres para verificar el carnet de vacunación de cada niño. No es opcional. Necesitamos un compromiso real de los padres y maestros”, añadió. A partir del lunes, día del retorno a clases, el SEDES desplegará además brigadas móviles de vacunación en unidades educativas, como parte de una estrategia agresiva para frenar la circulación del virus.

Habrá campañas de vacunación dentro de los colegios. Se exigirá la presentación del carnet de vacunación contra el sarampión. El barbijo será obligatorio para todos los estudiantes.

Esta combinación de medidas busca evitar un rebrote y proteger a la población escolar. La prevención ya no es una opción, sino una responsabilidad compartida. “La salud de nuestros hijos empieza por casa. Es momento de actuar”, concluyó Castillo.