El Concejo Municipal de Cochabamba aprobó la firma del contrato con la empresa CINVA, adjudicada para el tratamiento de los residuos sólidos del municipio por un periodo de 25 años, por un monto que supera los 1.300 millones de bolivianos.
La decisión generó una fuerte denuncia pública por parte de la concejala del MAS, Silvia Soliz, quien calificó el hecho como “el negociado más grande de la historia de Cochabamba”, alertando sobre un proceso clandestino, irregular y carente de toda transparencia.
La concejala sostuvo que el contrato fue aprobado sin conocimiento previo de los concejales opositores, de la ciudadanía ni de los medios de comunicación. Dijo que la convocatoria fue sorpresiva, breve y sin debate público.
“Hoy para hoy llamaron a una sesión de cuarto intermedio y de manera sorpresiva, sin habernos dado a conocer, ni siquiera a los medios de comunicación, absolutamente nadie conocía. Lamentablemente, en un par de minutos han aprobado este contrato millonario, irregular. Alcalde, no endeude a los cochabambinos por 25 años, deje de pensar en sus negociados y en llenar sus bolsillos”, manifestó.
