Entre lágrimas, una mujer denunció que por la falta de mantenimiento en las tinas personales de Liriuni, casi pierde la vida por falta de oxígeno al no poder salir del lugar.
La mujer, relata su experiencia por medio de las redes sociales, y comienza de la siguiente manera: ella llegó al lugar en horas de la tarde, como cualquier persona, alquiló una de las tinas personales ya que quiso usarlas como parte de un tratamiento para las articulaciones.
Ella preguntó si se podía aguantar una hora adentro, y el encargado le afirmó que sí era posible y así alquiló la tina 4. Antes de ingresar, una chica la anotó en su cuaderno el horario de ingreso. Una vez adentro de la habitación, ella sacó sus cosas, se preparó e ingresó al agua caliente acompañada de música, agua y bebidas para hidratarse.
De rato en rato, la denunciante miraba el reloj en su celular para saber cuánto tiempo le quedaba. En un momento determinado, empezó a sentir que le faltaba el aire, por lo que decidió salir de la tina y retirarse del lugar. Después de todo, solo faltaban 10 minutos, así lo detalló en el medio ‘Revelaciones’.
Se puso una bata y se dispuso a salir, pero descubrió que la puerta no tenía chapa por dentro y quedaban solo dos minúsculos agujeros por los que introdujo los dedos para abrir la puerta. Sin tener éxito, empezó a gritar para que le abran y también golpeó la puerta repetidas veces para ser oída, sin resultados. Logró abrir una ventana, y tras mirar a los lados, se dio cuenta de que el lugar estaba completamente vacío, y ningún encargado estaba cerca.
Tras ver esto, ella se desmayó y cayó directamente sobre la tina en la que estaba, su cuerpo, a medio vestir con una bata, se sumergió por completo y luego de varios minutos, reaccionó repentinamente con un dolor en los costados y el cuello, ya que se había golpeado al caer sobre la tina.
Sus cosas estaban desparramadas por doquier y recordó que quería salir del lugar, por lo que volvió a gritar y reclamar pero no había nadie.
Afortunadamente, una pareja salía de otra tina y al verla, la ayudaron de inmediato.
“De milagro he salido y me he vuelto a parar después de quedarme en el agua desmayada. Todo porque no hay una manivela para jalar desde ahí adentro esa puerta. Cómo no voy a poder salir de ese cuarto sola, y que tenga que pedir ayuda para salir”, reclamó la mujer entre lágrimas, remarcando que podría haber perdido la vida si nadie la ayudaba.
Así mismo le reclamó a la chica que la anotó y a una mujer de limpieza por la falta de mantenimiento, ya que todas las tinas deberían contar con sus manivelas para poder salir en cualquier momento de las tinas, y no quedarse encerrados ahí dentro.
Pese a los reclamos, nadie supo qué decir o qué hacer, por lo que la mujer no tuvo más opción que retirarse con todos los dolores tras su caída, y con la salud en peores condiciones. A ello, se añade que tuvo que pagar por su cuenta otros tratamientos para mejorar su estado.
