A días de haberse consagrado campeón de la Serie A con la Juventus, Cristiano Ronaldo tomó la decisión de hacerse un regalo por lograr sus objetivos en esta temporada tan complicada. El delantero se compró un Bugatti Centodieci, valuado en unos 8 millones de euros y es un modelo del cual solo hay 10 en todo el mundo.
El vehículo es considerado el más rápido del mundo y es capaz de sobrepasar los 490 kilómetros por hora, además se fabrica exclusivamente en la localidad de Molsheim, Francia. Este modelo se coloca dentro de la clase de autos deportivos de lujo, se fabrica casi exclusivamente artesanal.
«CR7 decidió celebrar un nuevo título con la camiseta de la Juventus y se regaló un Bugatti Centodieci, un automóvil hecho a su medida porque es una verdadera joya», publicó el periódico deportivo Corriere dello Sport. El portugués ya es dueño de dos autos de la misma marca.