Tras realizarse la audiencia de medidas cautelares del sujeto que fue denunciado por haber violado y embarazado a su propia hija, un juez decidió enviarlo al penal San Pablo de Quillacollo con detención preventiva, por un periodo de tres meses.
Ésta decisión fue bastante criticada por la Fiscalía departamental, quienes lo imputaron por violación e infanticidio y aseguraron que van a apelar para que el sujeto sea enviado hasta el penal de El Abra, por lo menos con 6 meses de privación de libertad.
Según las investigaciones Elías P. S. violó en dos ocasiones a su hija dejándola embarazada en diciembre de 2024. La bebé nació prematura de 7 meses, pero el llamado «Monstruo de Viscachas» la asfixió con una bolsa y posteriormente enterró el cuerpo a 4 kilómetros de su vivienda.
La víctima relató lo ocurrido a los comunarios de Viscachas en el municipio de Morochata y ellos se organizaron para poder capturarlo, lo que sucedió justo el pasado domingo 17 de agosto, día de elecciones.
El sujeto fue entregado a una autoridad de dicha localidad, pero según informó la red Uno, aparentemente ésta persona tenía algún parentesco familiar con el sujeto y lo dejó escapar.
Sin embargo, los comunarios presionaron y lograron atraparlo y entregarlo a la policía tan sólo horas después.
Según las primeras informaciones, el sujeto habría confesado ante los comunarios su crimen, incluso les habría indicado el lugar en donde había enterrado el cuerpo de la bebé, por lo que se decía que quería someterse a un juicio abreviado.
Sin embargo, en medio de su audiencia cautelar el sujeto habría cambiado de opinión y se negó a confesar el crimen perpetrado, por lo que el juez decidió enviarlo con detención preventiva y por el lapso de tan sólo 3 meses, hasta el penal de San Pablo en Quillacollo.
Por su parte, la defensoría de la niñez de Morochata se ha hecho cargo de los cuatro hijos del agresor, dos varones y dos mujeres, que quedaron desprotegidos tras la muerte de su madre.
Actualmente, los niños se encuentran en una casa de acogida temporal, mientras la institución busca a un familiar adecuado que pueda garantizar su bienestar.
