Evistas se burlan del sarampión «Es solo una estrategia política»

El diputado evista Renan Cabezas generó indignación al minimizar la epidemia de sarampión y calificarla como una “estrategia política” del gobierno para impedir las elecciones nacionales. Cabezas aseguró que usarán la excusa de las aglomeraciones, como en la pandemia de COVID-19, para suspender los comicios, evidenciando un desprecio alarmante por la salud de la población y la crisis sanitaria que enfrenta Bolivia.
“Ya habíamos denunciado en semanas atrás de que iban a decir que en el país había Covid para que no haya aglomeración, para evitar protestas sociales, para evitar que el 17 de agosto haya elecciones. Van a decir, hay Covid, que hay sarampión y no es ideal que en este momento haya elecciones, entonces van a buscar la forma de postergar las elecciones, están utilizando estrategias políticas para que no se lleven a cabo las elecciones generales este año. Todos estamos esperando que las elecciones se realicen el 17 de agosto, no puede haber dirigentes o autoridades prorrogadas, todos debemos cumplir nuestro mandado y ese día debemos marcharnos de la gestión pública”, afirmó el diputado evista.
Desde Chapare el evismo: «No vamos a aceptar elecciones sin Evo, tienen que llevarnos a la cárcel o matarnos para que Evo no sea presidente»
El dirigente cocalero del Trópico de Cochabamba, Gastón Ledesma, dejó en evidencia el extremismo del ala evista al declarar que su sector “entregaría la vida” para imponer la candidatura de Evo Morales, pese a su inhabilitación.
“No vamos a aceptar por ningún motivo unas elecciones sin Evo. Si quieren acallarnos, tendrán que asesinarnos”, amenazó. En lugar de respetar las reglas democráticas, Ledesma optó por el chantaje violento, acusando al gobierno de “provocar” por no permitir que Morales vuelva a postular, y advirtió posibles “reacciones” de su sector.
El senador evista Leonardo Loza denunció días anteriores que no retornó la policía al trópico cochabambino, al igual que continúan cerradas las instituciones del estado como el Segip y las entidades financieras y culpan al gobierno de estrategias políticas.

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