La Policía Local de Siero, en Asturias, al norte de España, halla a una mujer, de 68 años, desorientada y con graves signos de deshidratación en el interior de su domicilio. Este hallazgo constató que se trataba de una persona de la que su familia no sabía nada, tras desaparecer de la ciudad de León en 1995, y que había denunciado su desaparición dos años después, en 1997.
Según el informe de la policía la mujer vivía actualmente sola y se dedicaba al cuidado de niños y de mascotas de algunos de sus vecinos. Residía en el mismo domicilio desde hace más de 20 años.
La protagonista de este suceso abandonó su trabajo en 1995 tras pedir su finiquito, se marchó de León y dejó de tener contacto con su familia, a la que solía visitar los fines de semana. Posteriormente, llegó a enviar una carta a sus familiares solicitándoles que no la buscaran más, a la que acompañó de una fotografía reciente, según publicaron los medios locales.
Según información de los medios locales en 1997 familiares denunciaron su desaparición y cuatro años después, en 2001, debido al parecido entre la fotografía recibida y un retrato robot que se difundió. Agencia
